El
calor del verano invita a preparar comidas ligeras y hoy me he acordado de esta
receta que me dieron en su día, Isabel y Angelita, mis dos amigas de Vinaroz
(Castellón), afincadas en Andalucía desde hace muchos años. Se trata del Hervido
Valenciano. Su ingrediente principal son las judías o habichuelas verdes,
el resto puede variar según nos apetezca, pero siempre podemos lograr un plato
sencillo a la vez que sabroso.
La
receta que hemos preparado lleva:
- Judías
verdes
- Patatas
- Ajo
- Huevos
duros
- Aceite,
sal y pimienta.
Las
cantidades serán en función del número de comensales. Para que sirva de
orientación, se puede calcular aproximadamente unos 200 gramos de judías verdes por persona.
Vamos a prepararlas:
Cortamos
las puntas de las judías y con un pelador o con un cuchillo puntilla (pequeño,
muy manejable para pelar patatas, verduras y frutas) retiramos las hebras de
los lados, si las judías que hemos comprado las tienen. En el tipo bobby, será
suficiente con quitarles los extremos.
Las troceamos y las lavamos bien con agua fría, escurrimos y reservamos.
Ponemos
una olla con abundante agua al fuego, mientras tanto, pelamos las patatas y las
cortamos en trozos, como cuando vamos a guisarlas. Cuando el agua empiece a
hervir echamos las patatas, sazonamos con sal y pimienta. Las dejamos cocer
hasta que estén tiernas.
Igualmente
ponemos otro recipiente con agua al fuego y cuando empiece a hervir echamos las
judías verdes, agregamos un poco de sal y un chorreoncito de aceite de oliva
virgen extra. Las dejamos hasta que estén blanditas.
Cocemos los huevos en abundante agua caliente y un poco de sal hasta que estén duros, apartamos y pelamos.
Una
vez todo en su punto, escurrimos las habichuelas verdes y las patatas y las
colocamos en una fuente. Cortamos los huevos duros en cascos o en rodajas y los
distribuimos por la bandeja. Probamos y rectificamos de sal y pimienta.
A continuación doramos los ajos en una sartén con aceite, que los tendremos pelados y cortados en laminas finas previamente. Una vez en su punto, vertemos por encima del hervido.
Variantes:
El pimentón le da
un toque distinto. Si elegimos esta opción lo echamos en el aceite donde
doramos los ajos, añadiéndolo al final y apartándolo enseguida para que no se
queme y dé un gusto amargo al plato.
Si se prefiere se
puede aderezar con una vinagreta o salsa mayonesa.
Otra forma es
saltear el hervido con cebolla. En una sartén calentamos aceite y echamos la
cebolla cortada finamente. Dejamos al fuego hasta que se ponga blandita,
entonces se les agrega las habichuelas verdes y las patatas cocidas, las
dejamos unos minutos para que coja todo el sabor. Esta fórmula admite cuajar
algunos huevos en la misma sartén.
Las zanahorias
también son buenas acompañantes en este plato, tanto que si preferimos podemos sustituirlas por las patatas.
Me gusta mucho esta receta, rica y sana.
ResponderEliminarAsí es Charo.
EliminarSuelo hacerla de cena, y nos encanta, ya estoy en marcha otra vez, vaya veranito que tuve, me dieron la sorpresa mis hijos y eramo once a domir y comer durante una semana, habia camas por toda la casa jajaja, espero que todo este bien y que vuestro verano haya sido mas tranquilo que el mio, un besito primas
ResponderEliminar¡Vaya ajetreo, Mamen! Nosotras algo más tranquilas aunque en verano, es cierto, que siempre llegan familia y amigos y se les intenta atender lo mejor posible. Besos, bonita.
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